Siempre he soñado con tener una sonrisa perfecta, pero siempre me había dado miedo usar brackets. Cuando descubrí los alineadores invisibles Smartee, supe que era la solución ideal para mí.

El proceso de tratamiento fue muy sencillo. Primero, me hicieron un escaneo 3D de mis dientes para crear un plan de tratamiento personalizado. Luego, me entregaron un juego de alineadores que debía cambiar cada dos semanas. Los alineadores eran muy cómodos de llevar y apenas se notaban.

En solo 8 meses, mi sonrisa se transformó por completo. Mis dientes ahora están perfectamente alineados y soy mucho más feliz con mi aspecto. Lo mejor de todo es que nadie se dio cuenta de que estaba usando ortodoncia invisible.

Si estás buscando una forma discreta y efectiva de corregir tus dientes, te recomiendo los alineadores Smartee. ¡Son increíbles!